Vivir en un entorno que te genera malestar es como intentar relajarte en medio de un concierto de rock: complicado pero no imposible. Desde Centro Terapia Sanarte te extendemos de estrategias de autocuidado convencionales y otras menos comunes. Sí, la meditación puede ser genial, pero hay más en el mundo del autocuidado que solo eso. Vamos a desglosarlo sin adornos, pero con estrategias que realmente puedas aplicar, incluso cuando sientas que tu entorno ocupa tu bienestar emocional como un punching ball.
Meditación: No Solo para Monjes
La meditación puede sonar a cliché, pero es porque realmente funciona. No necesitas alcanzar el nirvana para sentir los beneficios; solo necesitas unos minutos al día para desconectar y centrarte. Si el “om” no es lo tuyo, hay apps que te guían sin necesidad de convertirte en un gurú espiritual. Existen tantas meditaciones como tipos de comida y te aseguro que hay alguna que se adapte a tus necesidades.
Escribirlo Todo: Terapia de Papel y Lápiz
Escribir lo que sientes puede ser tremendamente liberador. No estamos hablando de escribir novelas (a menos que quieras), sino de sacar lo que llevas dentro. Puede ser un diario, cartas que nunca enviarás, o incluso garabatos en una servilleta. La idea es que al escribir, dejas salir tensiones y clarificas tus pensamientos. Cuanto te sientes muy enojado/a o estresado/a por cómo es tu ambiente contigo, escribirles una carta que nunca van a recibir puede ser una de las mejoras cosas para liberar el malestar que estás sintiendo.
Hobbies que Absorben
Encontrar un hobby que te absorba tanto que olvides mirar el reloj no solo es satisfactorio, sino una estrategia sólida de autocuidado. Ya sea escalada, programación de videojuegos, jardinería urbana, tocar una instrumento, tejer, ir al gimnasio, cocinar, o incluso maratones de series (con moderación), lo importante es que te enganche.
Conectar con la Tribu: El Co-Cuidado como Pilar en Relación al Autocuidado
Encontrar tu tribu hoy en día es más fácil gracias a las redes sociales para conectar con gente que comparte tus intereses. El truco está en usar las redes sociales de manera que te sumen, no que te resten. También encontrar lugares físicos donde aprender alguno de los hobbies que interesan puede ser una buena idea.
Terapia Psicológica: El Upgrade Mental que Mereces
Incorporar la terapia psicológica en tu vida no es señal de debilidad, sino de inteligencia. Es como llevar tu coche al mecánico antes de que haga un ruido extraño. Y más aún cuando esos ruidos de alarma ya llevan un tiempo sonando. Un psicólogo o psicóloga puede ofrecerte herramientas para manejar el estrés, ansiedad y cualquier cosa que tu entorno te lance.
Cuidado Físico: Muévete de Maneras Que te Gusten
La actividad física es clave, pero olvídate de las maratones si correr no es lo tuyo. Bailar, caminar mientras escuchas podcasts, hacer yoga o pilates, nadar o incluso sesiones de boxeo al aire libre pueden ser tu forma de despejar la mente y soltar tensiones. Si te da miedo salir a hacer una actividad física, puedes partir haciéndolo por cada como por ejemplo con estos videos de rutinas de yoga para principiantes por la maravillosa Elena Malova.
Estas estrategias de autocuidado están diseñadas para ser aplicables, incluso cuando sientas que tu entorno es más hostil que una reunión familiar en navidad. El truco está en encontrar lo que funciona para ti y recordar que cuidarte es tu derecho, no un lujo.
